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Educación positiva: Fortalezas del carácter.
Fecha de Publicación: 11/3/2021Este último año y medio (o más) se nos han presentado retos que jamás imaginamos, en todos los ámbitos: personal, familiar, profesional. Dichos retos nos han pedido adaptarnos a una velocidad extraordinaria, para así continuar con lo que es ahora la “nueva normalidad”.
La situación actual en el mundo ha hecho replantearnos las prioridades que debemos de tomar en cuenta al momento de educar a nuestros niños, tanto en casa como en las instituciones. Ahí es donde entra la educación positiva, la cual toma las mejores estrategias de enseñanza – aprendizaje, más la ciencia de la psicología positiva, esto para que los educandos se sientan bien y estén bien.
El enfoque primordial es proveer de habilidades específicas que ayuden al estudiante a fortalecer sus relaciones, construir emociones positivas, cultivar la resiliencia, promover la atención plena y un estilo saludable de vida.
Una de las estrategias de la educación positiva es el reconocimiento de las fortalezas de los alumnos en sus personalidades, llamada “fortalezas del carácter” la cual enlista 24 fortalezas que todo individuo posee en diferentes grados dependiendo del contexto y de la emoción que se vive. A continuación se describen:
FORTALEZAS DEL CARÁCTER:
SABIDURÍA.
• Creatividad.
• Juicio.
• Amor por el aprendizaje.
• Perspectiva.
VALOR.
• Valentía.
• Perseverancia.
• Honestidad.
• Curiosidad.
• Vitalidad.
HUMANIDAD.
• Amor.
• Bondad.
• Inteligencia social.
JUSTICIA.
• Trabajo en equipo.
• Justicia.
• Liderazgo.
TEMPLANZA.
• Perdón.
• Humildad.
• Prudencia.
• Autorregulación.
TRASCENDENCIA.
• Aprecio por la belleza.
• Gratitud.
• Esperanza.
• Humor.
• Espiritualidad.
Ya reconocidas en esta lista, es fácil apoyar a nuestros niños a reconocerles las propias y a desarrollarlas en las situaciones en las que se necesiten. Identificarlas y expresarlas permite generar emociones positivas y que se vuelva un lenguaje común entre las comunidades en las que se desenvuelven.
Los invito a reconocer las virtudes que existen dentro de nosotros y de nuestros pequeños, ser amables consigo mismos y ayudarles a ir favoreciendo su inteligencia emocional.